«A Mother’s Love, A Daughter’s Prison»: El impactante manga basado en hechos reales llega a su fin

Basado en el libro de Aya Saitō, el manga retrata el crimen que sacudió a una familia obsesionada con el éxito.

Por Kaiju

21 de abril de 2025

La plataforma Magazine Pocket de Kodansha ha publicado el capítulo final del manga A Mother’s Love, A Daughter’s Prison (Haha to lu Jubaku, Musume to lu Rōgoku), adaptación de Satokun basada en el libro homónimo de Aya Saitō. La obra, inspirada en un caso real ocurrido en Japón, concluye tras meses de explorar los oscuros rincones de una relación materno-filial marcada por el abuso y la obsesión.

Una historia real que desafía al lector

El manga narra el crimen de Yaeko Miyagawa, una madre cuyo cuerpo mutilado fue encontrado en un río. Tras una investigación, su hija Hikari confesó el asesinato, revelando años de maltrato físico y psicológico por no cumplir con las expectativas de ingresar a una facultad de medicina de élite. Incluso después de nueve intentos fallidos, Yaeko mantuvo a Hikari atrapada en una «prisión» de exigencias y violencia, hasta que la situación estalló en tragedia.

La adaptación de Satokun, publicada desde el 28 de septiembre en Magazine Pocket, profundiza en los eventos previos al crimen y el destino de Hikari tras el juicio, combinando el rigor periodístico del libro original con el impacto visual del manga.

Aya Saitō y Satokun

Aya Saitō, autora del libro en el que se basa el manga, es conocida por abordar casos reales con sensibilidad y crudeza. Por su parte, Satokun logró trasladar esa narrativa al manga sin perder su esencia, usando un trazo expresivo que intensifica la carga emocional.

Mientras los fans asimilan el final, Kodansha ya prepara el lanzamiento del tercer volumen, que promete cerrar el círculo de esta historia desgarradora.

Kaiju

El final de A Mother’s Love, A Daughter’s Prison no es solo la conclusión de un manga, sino un recordatorio de las cicatrices invisibles que dejan el abuso y la presión familiar. La obra, al basarse en hechos reales, trasciende el entretenimiento para convertirse en un espejo social, incitando a la reflexión sobre las expectativas tóxicas y sus consecuencias. Satokun y Aya Saitō han creado un trabajo que, pese a su dureza, es necesario.